Los gases nobles o raros
El grupo VIII A (actualmente 18) recibe también el nombre de grupo 0 o el de los gases raros, nobles o inertes. Todos los elementos de este grupo tienen el último nivel electrónico completo lo que los vuelve muy poco reactivos. Son entonces moléculas monoatómicas ya que no se combinan ni consigo mismos. Sin embargo en determinadas condiciones se han sintetizado varios compuestos de kriptón y xenón. Helio: se produce en forma continua en el sol por fusión de átomos de hidrógeno a temperaturas de millones de grados. Debido a su inercia, el primer uso del helio fue sustituir al hidrógeno en globos aerostáticos. Actualmente la mayor parte del helio se utiliza en la industria espacial para aumentar la presión de combustible de las aeronaves, como refrigerante y como diluyente del oxígeno en la atmósfera de las naves y transboradores espaciales por ser más liviano y menos soluble en la sangre que el nitrógeno del aire.
Neón: se utiliza básicamente en la iluminación eléctrica (luces de neón)
Argón: reemplaza al oxígeno donde pudiera llegar a originar una combustión, por ejemplo en el interior de las bombillas eléctricas (focos) y para eliminar el oxígeno gaseoso disuelto en los metales fundidos en metalurgia.
Xenón: desde 1962 cuando se obtuvieron los primeros compuestos de xenón, se puso en duda la inercia de los gases nobles. Por reacción con flúor se obtuvieron XeF2, XeF4 y XeF6. Además se prepararon compuestos con el oxígeno. Kriptón: se han obtenido también compuestos por reacción con el flúor. Radón: todos sus isótopos son radioactivos y por lo tanto difíciles de estudiar. Se ha descubierto que puede ser un contaminante de las viviendas ya que se libera al suelo en amplias zonas y se difunde e introduce en los edificios a través de los cimientos. Para evitar el efecto acumulativo es necesario mantener muy aireados los interiores de los edificios.